viernes, 21 de mayo de 2010

ME SOBRA EL DON DE LA MENTIRA

Como la noche olvidó mi nombre,
salgo temeroso a visitar la dicha;
no se dónde encontrar un buen pretexto
para tomar su casa por asalto.

Como me sobra el don de la mentira,
oculto mi dolor y grito y río.

No hay poeta más vil que el olvidado,
ni más sabio poeta que el perdido.

En esta noche amnésica y traidora,
donde mi nombre no cambió de nombre,
el extravío me lleva a todas partes:
busco de la luz la boca abierta.

Como me sobra el don de la mentira,
recojo del amor algún mendrugo.

No hay futuro que cuente en esta noche.
Todo es pasar de largo por la vida.

1 comentario:

  1. Muy buen poema. Tiene un buen ritmo debido a la abundancia de endecasílabo.

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