viernes, 30 de octubre de 2015


si yo no fuera el octavo hijo
si en mi ataúd cupiese tu recuerdo
valdría la pena luchar

pero no dejaré de ser el octavo hijo
ni sabré competir como si fuera el primo




la muerte aborrece los laberintos
los sótanos las zotehuelas
en mi ataúd sólo cabrá mi infancia
el miedo va incluido
y el rencor y todas esas cosas
que extraño de mi

y que nunca he tenido

No hay comentarios:

Publicar un comentario